La raíz del mal y el árbol de la vida
Mientras orabamos y adorábamos al Gran Yo Soy en la Zona Cero, mirando hacia las profundidades de uno de los fosos de las Torres Gemelas, el agua bajó en cascada por los bordes y desapareció en la oscuridad, como si no pudiera cumplir su propósito de dar vida. En ese momento de adoración, en un punto donde se supone que es un lugar de dolor y muerte, uno de nosotros tuvo una visión y en ella había una raíz oscura bajo la Zona Cero, una raíz de maldición que se había arraigado y que no podía ser desarraigada.

Sin embargo, esa raíz oscura fue arrancada por la mano del Todopoderoso y la tierra fue redimida y sanada por la sangre de Yeshua. El agua que caía en cascada por los bordes del oscuro pozo, ahora podía regar la semilla profética que representaba el destino de los Estados Unidos. De hecho, esa semilla comenzó a crecer fuerte y alta, con ramas llenas de frutos. Era un árbol de la vida. La raíz del mal había sido destruida y la luz de Yeshua llegó, incluso hasta las profundidades del oscuro pozo para activar el destino de América, para un momento como éste, en el lugar más improbable.
Así como Lázaro que resucitó al cuarto día, sentimos con seguridad que en ese lugar donde el Espíritu Santo nos dijo que nos quitáramos los zapatos porque era tierra santa, Él está esperando al cuarto día para que todos los que vean el derramamiento del Espíritu Santo en los Estados Unidos, puedan glorificar sólo a Dios ya que sólo Él puede hacer tal cosa.

Así como Isaías habló a los que estaban de luto en Sión, sentimos que el Espíritu Santo nos decía que habláramos a la tierra y al pueblo de los Estados Unidos. A aquellos que le reconocen y se apartan de sus malos caminos y están intercediendo para que se haga justicia en los Estados Unidos. El Señor de los Ejércitos está escuchando y no está en silencio. A los contritos de corazón que entienden que tenemos sangre en nuestras manos, como americanos que han heredado la iniquidad de nuestros antepasados, nosotros como nación nos encontramos en un precipicio, podemos elegir si vamos por el camino de la que una vez fue "la arrepentida Nínive" o de la que fue una vez "la orgullosa Jerusalén". De acuerdo con la clara visión en la Zona Cero, Isaías 61:2-3 es lo que podemos esperar si nos arrepentimos de verdad y Adonai sana nuestra tierra.

"A proclamar el año de la buena voluntad de YHWH,
Y el día de venganza del Dios nuestro,
a consolar a todos los enlutados;
a ordenar que a los afligidos de Sion (América):
se les dé gloria en lugar de ceniza [en sus cabezas, una señal de luto],
óleo de gozo en lugar de luto,,
manto [expresivo] de alegría en lugar del espíritu angustiado;
y serán llamados los árboles de la justicia
[fuerte y magnífico, distinguido por su integridad, justicia, y su correcta posición con Dios],
plantío de YHWH, para gloria suya".

El árbol de la vida que emerge desde el oscuro pozo de la muerte, sólo es posible a través de Yeshua y el Espíritu Santo que nos hace árboles de justicia arraigados en Él, para la gloria del Padre, preparando el camino para el regreso de Yeshua. No te canses de interceder por Américano permitas que el príncipe de los aires, Satanás te confunda y te robe la victoria que está germinando. ¡Hermanos, no es suya para que te la robe!
El poder de resurrección de YHWH está dentro de nosotros,esta victoria es sobre el pecado y la muerte, que desarma completamente el reino caído de las tinieblas. Pero si creemos las mentiras que están siendo difundidas, entonces hemos perdido las promesas de Adonai.
¿A quién le crees, oh novia de Yeshua, al Príncipe de las mentiras o el Rey de la gloria? Que la verdad, la justicia y el derecho salgan de nuestras bocas como una espada de doble filo, que la palabra viva de Dios salga de nuestras bocas. Que toda mentira del enemigo caiga al suelo y que las maldiciones se conviertan en bendiciones en el nombre de Yeshua. Oramos para que Adonai nunca diga de los Estados Unidos esto: "Vio que no había ningún hombre, y se sorprendió de que no hubiera nadie que intercediera [en nombre de la verdad y el derecho]". Persevera firme y sé un atalaya en los muros, mantén tu lampara llena de aceitey que el fuego del Dios Todopoderoso continúe iluminando tu camino mientras sigues en la brecha por esta nación.